lunes, febrero 26, 2018

El silbo del mar

Silbando…
el amor gesta al niño!
envuelto en las aguas rosas
de su saco amniótico navega
entre sus nutrientes corrientes
absolviendo en ellas sus esencias
en una aventura de nueve meses
silbando bajo el cielo del vientre
Y llegas en nacimiento!
envuelto en luz silbando sobre
el viento que enjuga su rostro
anidándose en el tierno regazo
silbando bajo el amor de la madre
luego crecer bajo ese mismo amor
la vida silbando!

Pero hermano!
en este tiempo en esta sociedad
en esta cosa amorfa que llaman vida
el hermoso lienzo del derecho a la vida
se le fragmenta con lágrimas y sangre
pero si hay lágrimas llanto que vuelven
a soldar sus fragmentos...
Las uvas de playa
¡Qué trayecto recorremos con el anhelo de vivir!
silbando nacemos enjugados por las brisas del mar
bajo el signo luz del verdor del trópico de cáncer
por donde llegan enjambres de pétalos de Mayo
cabalgando áureas de marzo-abril resplandecientes
sobre el mar Caribe en amanecer teñido de azul añil
y en atardecer pintado de verde llamando a la noche

Mar como el viejo aguador  repartiendo
vidas en sus aguas gama azulverde
a todo lo largo de su sinuosa costa
de golfos ensenadas bahías a puertos
dando de beber a sus poblantes hijos

Y en los cuencos de sus manos almas
y corazones beben sus aguas de vidas
bajo cielos poblados de constelaciones
como la siempre hermosa Cruz del sur
a quién sus gentes le cantan galerones
iguales cantares al propio mar Caribe
y en medio de esos cantares la madre
también cantando entre cielos y mares

Playa Tio Pedro/Carúpano/Edo. Sucre/Venezuela 
Y en un tramo de su sinuosa costa
se dió aquel nacimiento de hermanos
que en el tiempo se harán más hermanos
bajo encendidas noches de la Cruz del sur
llamada también Cruz de mayo ¡como luces
manando de las flores de los sembradíos de
auyamas mezclándose con las luces de plata!

Qué atmósfera prendida como umbrela floral
que los une en lazos irrompibles como coro
que fluyen cánticos versos a la madre
“en tu siembra
un clavel blanco
lágrimas de amor
acallando a la muerte”
 
La constelación Cruz del Sur 
Y entre esos versos como titilar de estrellas
bajan tañidos lánguidos extendiéndose
 “madre siempre
en el mar
en la tierra
en el viento
su vida luchando
callar la muerte”
con trazas de alegrías sobre lágrimas dulces
verso que historia la vida de la madre ¿cuándo la
historia universal recibirá su herencia de ternuras?
testificando que sus hijos les son yemas puras
como le son los peces a las aguas del mar
 
Madre Carmen Susana
Y en esa historia anidan los momentos
felices en mixtura con los de tristezas
que forjan hijos en hermandad irrompible
pero con almas en lienzos de melancolías
que se esfuerzan por construir sus sueños
y que sin saberlo tejen para vivirlos como
esencias que sin verse impulsan sus vidas

Dos hermanos sintiendo muy adentro el mar
y a ese sol caribeño dorándole sus vivencias
recoger chipichipes o corretear sus olas o
pasar horas viendo el andar del caracol o
soñar volar en el vuelo de aves marinas
o sobre el viento con sus voladores o montar
sus bicicletas con el equipaje de sus ilusiones
¡Oh ese barco que navega a sus lugares soñados!
¡oh aquel soñar-vivir  sobre el regazo de la madre!
entonces pueden decir ¡historia que hemos vivido!
 
Zarpando del puerto de Carúpano/Venezuela 
Y ciertamente!
ya nutrido por estas vivencias de infancia
el resto de la vida ha sido solo puro soñar
¡vivir feliz en la juventud y en la adultez!
llegar riendo a las aguas de la ancianidad!
¡recibir en alegría a la muerte bienaventurada!
pero son sueños que la cruda realidad rompe

Y cierto! han podido vivir felices aconteceres
¡oh el nacimiento de sus hijos luego verlos
sentirlos florecer como esas flores de auyama!
pero cierto! cuánta historia ajena como
un cerco agresivo a sus aconteceres felices y
eso duele en lo hondo de sus almas ¿por qué
no ser siempre entera la felicidad en la vida?
¿por qué sólo vivirla en retazos mal cosidos?
 
Flor de auyama abriendo 
 Y sobre un rasgar lejano de cuatro
llegan voces atropellándose en alegrías
que el oleaje esparce hasta los horizontes
¡qué vivencias de infancia como mar encrespado!
y bajo aquel viejo uvero todavía goteando uvas
sentarse a mirar las durmientes olas trayendo y
llevándose trozos de viejas maderas de barcos
y esas lanchas meciéndose o durmiéndose
como soñando ingenuas aventuras en el mar
¡hermano aquella tarde juntos imaginando navegar
¿esas lanchas son las mismos cuando éramos niño?

Playa Guayacán/Carúpano/Edo. Sucre/Venezuela
Y ¡qué hondo sentíamos el silbo del mar!
contándonos viejas leyendas de marineros
como aquella del niño recogiendo estrellas
de mar creyendo que han caído del cielo y
una a una en alegría van devolviéndoselas

Y sienten a la madre en nube azul
sobre la melodía del movimiento del mar
llamando a vivir en libertad como sus olas
¡qué inmenso su cuerpo moviéndose que
mece dulce al bajel donde viaja la madre!
y algo indefinible adentro les estremece
¡ahora se ven renaciendo en aquellos niños
bañándose en sus aguas riéndose como olas!

Y uno le cuenta al otro hermano
mirando aquel sol que ríe ¡el mismo que
pintaba con su carita amarilla y sus ojos
asombrados y curva sonrisa de alegría!
y ¿cuál niño no pinta este sol como
ocultando la alegría que lleva dentro?
ambos ríen rememorando el cuento

Sus ojos mirando la inmensidad del mar
atisban el camino hacia la ancianidad
¡oh vivirla bajo este manto de la infancia!
y se miran… ¡como niños sí hemos vivido!
pero ¿y la juventud hasta llegar la vejez?
la blanca mortaja abraza al cuerpo para
guardar  ese amor que ha vivido con él
mirando alegre el vuelo del espíritu libre
y el silencio del mar silbando dentro
les baña las costas de sus biografías
el arca de las huellas de sus vidas

sábado, enero 13, 2018

Kyrie eleison


 Del Universo nace
el planeta Tierra
y sobre él girando
el nacimiento de la vida
y en ella el hombre para
habitar  la naturaleza
Universo y Tierra
naturaleza y hombre
eso es todo lo que hay
¡no hay más nada!
solo falta la obra del hombre
pero hombre hecho humano
 
El expolio/El Greco 
La vida después de nacer
y diversificarse sobre la Tierra
como araña minuciosa amorosa
talla la mágica tela de la más
alta condición humana que
reserva a su criatura hombre
para que la haga suya
en un momento de resurrección
y será más espíritu que materia

Kyrye ¡oh señor!
¡altissimis!
el hombre mismo
conjugando al verbo
llamándose cantándose
buscándose amándose
tallándose en constante Yo
para elevarse exaltarse
gestar ¡sólo gestar!

Eleison ¡compadecerse!
por mi desgracia
mi gran tragedia
¡soy único creador!
pero si compadecerse
por lo que hizo o hace
puede ser enmendador
de lo que hizo o hace

Ay! Eleison eleison!
suma de todos los dolores
sufrimientos carencias
desengaños desesperanzas
ahuyentando las alegrías
¡qué gran tragedia tejiéndose
destejiéndose en su madeja!
el encuentro del yo hombre con
el Yo Ser hombre aún no logrado
¡gran dilema a enmendar!
¡Yo el enmendador!

Y cuando se encuentren
¡y se encontrarán!
al fin será el Hombre
definido plenamente
en su corazón en su alma
en su condición humana
¡el humano!
al fin develado de esos
velos que lo envuelven
¡Kyrie!

El mismo Yo
su propio dios
su sacerdote
su iglesia
¡el único creador!
bajo el Universo y
sobre la Tierra
¡olor a cosmos a
tierra a piedra
hecho del amor!
 
El pensador/Auguste Rodin 
Porque somos como estrella
hecho de polvo cósmico
¡alto origen de su nacimiento!
del que ha de construirse dentro
de la envoltura condición humana
para llegar a ser ¡Ser!
¡un compacto Yo mismo!

Y por eso en el tiempo
los que amamos la vida
en silencio ocultándonos
nos hemos venido
cantándonos y amándonos
combatiéndonos y exaltándonos
compadeciéndonos y enmendándonos
poetizándonos en estas conjugaciones y
como la misma araña tejiendo esa labor
seguiremos hasta ser lo que queremos ser

La música la poesía
la pintura la escultura
las hacemos para expresarnos
la ciencia la filosofía hechas
para que nos expliquen
en un ¡Yo totalidad!

Entonces ¿cómo existir un ser
superior por encima del Yo
como creatura por siempre?
sí Yo es el poema inconcluso
haciéndose rehaciéndose
pero siendo el único poema
¡totalidad de totalidad!

El ángel azul/Vincent Van Gogh
Pero música poesía escultura
ciencia pintura y filosofía
¡todas ellas! todavía imperfectas
expresándonos definiéndonos
aun sin encontrarnos plenamente
el hombre sin conocer al hombre
el hombre enemigo del hombre
¡Ay qué gran tragedia vivimos!
¡kyrie eleison!

Pero Yo mi existencia
yo mismo buscándome
en otra existencia
concreta transcendente
¡el humano!
para definitivamente
dejar atrás a este hombre
envuelto en capas de violencias
como su cáscara temporal
como lo hace la serpiente
cambiando de piel
 
Demócrito reflexiona sobre el alma
León Alexander
 Y superando la tragedia
trascendiéndola
kyrie será sólo kyrie
la luz en que me busco
yo mismo
¡altissimis!
 
El Greco se pinta como Jesús/El Greco
 ¡Oh hombre escribidor
cantador hacedor tiéndele
tu mano tu corazón tu alma
tu mismo al otro hombre! y
en las alturas encuéntrate
hombre en hombre
hasta hacerte ¡humano!
vivir pleno en vida plena
al fin Oda de la Alegría
¡kyrie!

¡Kyrie eleison!
el hombre buscándose
pero ya no en la compasión porque
compadecer también es violencia
contra el otro y consigo mismo
 sino el hombre buscando al hombre
en el océano de su propia tragedia
para hallarlo con su irredenta alegría
envuelto en las blancas nubes del amor

Y esa búsqueda ansiosa
invirtiendo todo su tiempo de vida
probando a cada dios que son todos
de su propia creación intentando la
explicación-esclarecimiento de su vida
¡al fin ha de encontrarse así mismo!
como lo hizo el Beethoven hombre
cantándose en su Oda de la Alegría
o Mahler en su sinfonía Resurrección
para ser Kyrie ¡sólo Kyrie!

Porque para esta vida se nace
vivir el vivir que de ella gestamos
entonces proclamamos
¡soy la vida! ¡soy el vivir!
¡Yo único Kyrie!
¡al fin Yo mismo
bebiendo en el tazón
de mi propia alegría!

Kyrie! kyrie!
porque ese Dios
¡oh señor!
seré Yo mismo
padre madre hijo
hermano amigo

Y el puesto cósmico
que nos dio el universo para
construirnos lugar cósmico
nuestro universo propio
¡propio! ¡nuestro!
¡yo hombre transpuesto
a Yo humano!

¡Resurrección in altissimis!
solo espíritu en su cuerpo templo


domingo, diciembre 10, 2017

Dialogantes

Nacimiento!
sólo para que el mundo exista y
éste mundo para nosotros vivir
pero ¡mundo que soñamos!
cristalizándose en reales bellezas
y en breves pergaminos de sueños
que también haremos realidades
Y así a pulso vamos tallando
la hermosa cadena de la vida
aquella que queremos vivir
¡hoy viviéndola en ensueños!
Oposición a este presente
¡antivida! que nos engulle
la permanente violencia
el gran absurdo del hombre
su aberración existente que
persistentemente le destruye
Entonces nuestra contra-acción será
¡amarnos!  persistentemente el ¡amor!
el mayor anhelo que nos hará humano
mientras tanto podemos vivirlo
sólo  en nuestro aposento del alma

  
El alma mirándose en su espejo naranja
oyendo ese tenue murmureo de acordes
de órganos dialogando con corales
fluyendo del inmenso cuerpo del mar o
también en la imperceptible aura silencio
que el sol va irradiando yendo a su ocaso o
en los ecos de ondas del conversatorio de
las estrellas mirando el hacer del hombre
susurros cómo por qué para qué se vive
entre ráfagas violetas de melancolías
que forjan encendidos ensueños
¡el hombre anhelando otro vivir!

Pero al despertar a la dura realidad como
burbujas van estallando sobre ese mismo mar
dejando al desnudo el esqueleto de la vida
mientras ese mar el sol o las estrellas
siguen viviendo en su alegría silenciosa
dejando fluir esos códigos que el hombre
sólo siente con el alma como llamándole
¡misterios que quiere descifrar!


Ensueños que escapan de párpados
entreabiertos el alma tejiéndolos
yendo al levante del sol sobre su arco
cruzándose vivencias desde sus senos
¡mutuamente entregándose suspiros
y en la brisa él les devuelve rocíos!

¡Oh infancia ensoñándose en los espacios
azules entre los dulces pliegues de la madre!
¡oh sol cómo maduras el maíz que las
artesanas manos de la madre llevan al molino
para empujar la vida hacia adelante!
¡oh sol en mis edades cuánta vida
entregándonos para construir!
pero ¿lo hacemos?

Y bajo ese baño de radiación solar
palpas mi inquietante cuerpo palpitando
cada vez más apurado como si la vida
estuviera buscando lugar definitivo
como la de ese mar rebobinando sus olas
u ondas del sol navegando hacia su ocaso
o el pupilar de las estrellas platicándonos


Ay mar! oh sol! qué vida que vivo
¿por qué? tan diferente a las que  viven
¡pero de quién es esta vida! ¿del alma
escapándose de entre los ensueños
tratando de mutarse en otra?
¡sol sobre el mar! ¡mar bajo el sol!
sin cesar intercambiándose vidas
nunca se cansan en su mirar mutuo
y los ensueños mirándose tampoco
cruzándose sus rumbos aun inciertos
los mismos que llevamos dentro
entonces ¡cuándo fundirse en uno
juntos en armonía hallar el rumbo!

¿Sonríes sol? desde tu convexividad
incansable tu labor pastoreando a
tus criaturas también incansables
buscando más allá de tú ofrenda
como el niño cuando te está mirando
o mira a las estrellas o al mar o a sus
mismos sueños desde sus bordes
jugando bajo tus rayos con cualquier
objeto que transforma en juguete

Pero desde un ensueño intranquilo ¿acaso tú
misma desde el sol o de la luna o de una nube?
como puntada sueltas la pregunta inquisidora
Homo!  ¿por qué tanto extravíos?
y en tonalidad enigmática vuela tu voz
¡búscame entre los pliegues del mar!
resguardándose de tantas inclemencias
pero sin dejar de buscar junto a la madre
la vida en el horizonte cargando su equipaje
¡largo trayecto! ya es tiempo de balance


¿Balance? No! ¡no te digo que has terminado!
las estaciones de la vida son largas para vivirlas
cuando el hombre no rompe el equilibrio natural
por eso no dejes de levantarte conmigo y
navegar juntos sobre el arco convexo del sol
mientras el nacer de niños sigue imperturbable
¡la maternidad de la madre fuente inagotable!
pero  ¿para qué tantos niños si la vida
anda columpiándose entre rupturas?

Si! un columpiar pero en un solo columpio
como ajuga en una mano tejiendo el bordado
porque la obra de la vida es inconclusa
como la Sinfonía Inconclusa de Schubert
pero siempre buscándose hacerse contínua
y porque en la armonía de su equilibrio
está la potencia de su crecer para repartirse
por igual en lo infinito dentro de lo finito
como la sinfonía Nuevo Mundo de Dvorak

Pero ¿ese equilibrio no está roto?
sí! pero quedan en sus aposentos
fragmentos de sus fuerzas vitales
para la recomposición de la vida
como aquellas Variaciones de Bach
que cuando juntas las escuchamos
la recomponemos en una sola sinfonía
¡vivámosla en su hermosa extensión!

Pero alma ¡por qué quijoteas tanto!
ando ocupada desbrozándote el camino
para que sigas adelante que si persiste llegarás
aunque saciar incertidumbres no es tarea fácil
¿crees acaso que son pocos los anhelos
sueltos en esta inmensa y vorágine selva?
¡me empeño crearles hábitats para
que la vida pueda hacer su selección!


 Ay alma! eres como alba curioseando
 y sé que te detienes a mirar al  mar
extasiándote en sus olas ahítas de alegrías
que navegan encrespadas en espumas
y sin parar constante las persigues
envolviéndote en ese blanco ovillo
creyendo que allí están tus entresueños

Y cómo paciente lo escudriña en la playa
aprendiendo cómo tejer lo que ellas tejen
la vida en ese ir y venir sin nunca acabar
¡esa vida que desde que extravió su historia
todavía anda enmendando sus yerros!

Y mira! cómo tus ensueños sobre el mar
pintándolo nos narra su bella inmensidad
fluyente de su cuerpo hecho cristales
donde se refractan miríadas de arcoíris
conteniendo tantos destinos del hombre
mientras él los mira sin saber cuál tomar
¿la vida más allá de su horizonte que
no es la misma que a su espalda carga?

Y esperando ¡abismado! observa al mar
¡qué inmensa belleza igual su inmensa espera!
y en comunión al sol ambos abrazándolo van
almacenando anhelos de los espacios azules
que como olas constante les van llegando pero
todos saben que es la vida quien decide cómo
para qué cuándo tomarlos para construirse
¿los mismos misterios tallados en el tiempo?

Pero alma ¡ese andar tuyo…!
incansable en velamen navegando
por ese espectro azul  igual al de la madre
y es el caracol quien da señales de tu paradero
¿cuándo te detienes? peregrinando en el paisaje
o por los caminos del viento sobre el mar o
en las alas de una gaviota buscando su ruta
o tú misma dentro de tí misma entre cuerdas
componiendo los acordes en sinfonías o como
infinita compañera de la madre cantándole versos


Cualquier lugar es su sitio universo aunque
prefiere con la madre donde más gusta habitar
ocupada en mirar cómo cuánto crece el horizonte
empujándolo hacia adelante tendiéndotelo

Y como desprendiéndose unos
de otros los ensueños van despertando
¡qué sonoridades! en melodías sobre las olas
desparramando acordes compuestos en
sol y fa unas veces o en do y mi otras veces
la canción de amor a la vida tuya mía todos
escanciando esencias que aspiran llenar
ese largo vacío que carga el hombre
¿o eres tu misma dentro de ti misma
dúo de cuerdas señalándole la senda?

Y alma ¿dijiste hacer balance? Sí!
pero dejando al ciclo de la vida
que siga en su inconcluso desenlace
dando lecturas del curso del velamen
de velas blancas sobre ese horizonte
donde voy descifrando los códigos
¿hasta cuál puerto o estación llegar?

Y en ese desenlace siempre reempezándose
nunca olvidar ¡sólo el alma el corazón
saben ver leer y captar las esencias!
pero de aquellos que viven encendidos
viviendo a lo largo del ciclo de la vida