jueves, junio 10, 2010

Vivir sobre violín o piano





Porque no puedo vivir sobre la tierra como yo quiero
me pongo a vivir en su atmósfera
o sobre las alas de los pájaros
o en la cima de un pistilo de la flor
o en las teclas de un piano o cuerdas de violín
o más frecuente en las pupilas de mis niños









Elegía en palabras sueltas


Un hombre confiesa no saber tocar ningún instrumento musical
mucho menos la música que se anida en sus tristezas o alegrías
pero cuando oye o ve tocar alguna composición en un violín o piano
en ese momento sabe como sentirla entre sus pliegues íntimos
como usarla como pincel para resucitar el mundo que pintó
desde aquellos atardeceres que solía mirar cuando niño frente al mar
Y toda esta resurrección en el aljibe de su alma
se eleva como la pura orquestación de la magia
la escultura de los sentimientos en materia sensible
que le permite llevar la vida que anhela en estos destellos fugaces
que forman el equipaje de sus barquitos de papel de la infancia
en donde viene navegando por los oleajes de la vida de este tiempo



Luz (fondo)_Armando Reverón
 
¿Cómo es posible esa magia en esas pocas cuerdas?
y cuando oye alguna de sus instrumentaciones
entiende muy adentro la existencia de un milagro
pero el milagro de vivir una vida verdadera
aunque sea en pequeños instantes
sus puntos luminosos de la existencia

Y también sabe mirar las pocas cuerdas de ese violín o piano
que se estremecen por el halo de algún espíritu convocado
que deja oír el asombro posible de la interpretación musical
fluyendo de una armonía invisible como el canto de un pájaro
o el rumor de hojas reverdeciéndose para anunciar la primavera
Y todo este fluir de ondas pone en vilo su alma estremecida
como por ejemplo en “el doble concierto para violín” de JS Bach
y bajo la lluvia de sus notas todo su ser anida en el ensueño
sintiendo en el tejido de los compases la intensidad de la vida
y el último en su calidez le deja transido de una serena alegría
suelta la respiración profunda que distiende la faz de su rostro
y como el pequeño manantial que fluye para hacerse río
inconsciente se pone a silbarla



Tres aves_Georges Braque


Aspiración de ser un pájaro?
Remembranza de vuelo que empieza y no termina?
Arquitectura de tejido que no concluye pero con
anhelo de llevarlo a su fin?
Pujo de la melancolía para llegar a la alegría?
Sinfonía de la vida siempre inconclusa?




Aves_Georges Braque

Y en esa vibración de cuerdas confundidas con las de él
que va desgranando las notas de la escala musical
donde se componen los conciertos de la vida por venir
toda su carne y sus fibras sin consciencia del por qué
vibran en cada significado tonal del Do hasta el Si
entre el desfile de los compases que se entretejen
Y allí todo su Ser se conmueve desde la raíz
como la hierba solitaria en medio del vendaval
como la libélula revoloteando sobre el farol
pero al fin gozoso intuyendo que asi debe ser el vivir real
y que puede llegar resucitar un trozo de vida propia
y es cuando siente entre sus manos algunas finas hebras
o alguna flor roja tomada en el jardín del universo
y comprende que con ellas puede hacer otra historia


Marcel Marceau


Pero si esto es como el misterio donde intuye la otra vida
también le parece serlo cuando llega a fin la melodía
o como cuando parte a otra dimensión algún ser querido
y trocitos de amor le quedan entre sus manos sudorosas
entonces las hebras como magia escapan de sus manos
o entre ellas la flor roja lentamente se va marchitando
y otra vez se instala la pregunta antigua del hombre
el misterio oscuro como la joroba sobre sus hombros
y como si estuviera acampando bajo un sol de mediodía
despierta a la dura realidad de la existencia


Sol_Alexander Calder

Afortunadamente como recuerdo o impronta de huella
se sigue escuchando la melodía como el batir de olas lejanas
y como en la “música del país del alma” de Juan Sebastián Bach
se pone a vivir la vida que quiere en el limbo de su alma conmovida
y entonces la posibilidad se le abre como una aspiración cierta
y puede construirla en otro tiempo sobre el planeta Tierra
y es cuando la melancolía puede convertirse en risa abierta
y ver como los crepúsculos preparan las albas y las auroras
y entiende el por qué del indetenible nacimiento de niños
cada vez aproximando el deseo a la realidad de otra humanidad
Y así vive como el barquito buscando el puerto a donde llegar
pero con la certidumbre que cada vez se acorta la distancia
y escucha el fluir del grito libre en humos azules de aleluyas
y cuándo las mariposas saben cuando volar a sus sitios cálidos



Mary Cassat



Y en el violín o en el piano cuando los escucha cantar
se entrega a vivir como la flor el fruto los pájaros
o aquellas nubes moteando a las estrellas
o soñar como lo hace el niño recién nacido
o como el reír y mirar de sus niños
o humedecerse en la dulce humedad de los ojos de su madre
y siente como le llega la propuesta del hombre de hacerse humano
dentro de una vida que sea reino de amor justicia belleza y libertad
El violinsta azul_Marc Chagall

 Y como el advenimiento de un milagro de vida
en su pequeñísimo nanominúsculo universo
arquitectura su fundación sin puertas ni ventanas
para que el viento sea un huésped permanente
y las constelaciones de estrellas el techo de su mirada
donde leer siempre el camino por donde debe andar
y para saber donde montar y desmontar cuando él quiera
la tienda de campaña de la vida verdadera


 

El mundo nuevo_Magritte


Y de dónde viene el anhelo?
Anhelo y Ser son dos entes distintos?
Y por qué ese vivir separados?
Y hasta dónde son capaces de llegar?
En el trayecto pueden algo construir?
O sólo atmósfera sobre la tierra?



Noches de estrellas_ Vincent Van Gogh


 Brisas sobre el rostro
lluvia de rocío sobre la piel
neblina que cabalgue sobre el cuerpo
suspiros y melancolías que pintan sus perfiles
esencia de niños que le humanizan
risas en las pupilas de sus niños que le alegran
la dulce humedad en los ojos de la madre
vibración del alma conmovida
y esa “música del país del alma”
se dispara como la línea en la hélice
hasta alcanzar a un mundo de amor y alegría




Y posible hacerlo
porque somos la inteligencia sobre la tierra
labrando el único humano habitante del universo
que ni siquiera el asombro
hecho cosmos puede superar
como este reír y mirar de sus niños














































Y para quién quiera escoger
ofrecemos fragmentos de
“el doble concierto para violín”
de Juan Sebastián Bach,
en los violines de dos gigantes intérpretes


Yehudi Menuhin and David Oistrakh play Bach Double Concerto for Violins



Yehudi Menuhin & David Oistrakh - Bach Double Violin Concerto in D minor - BWV 1043 - Vivace



Menuhin & Oistrakh - Bach double violin concerto in D minor - BWV 1043 - Largo ma non tanto




Yehudi Menuhin & David Oistrakh - Bach double violin concerto in D minor - BWV 1043 - Allegro