Y frente a este mundo solo existe una respuesta: la resurrección de la vida |
El hombre y la historia
la contrahistoria
la lucha histórica de hoy
la cual nos ha construido
y la cual cesará hasta
que fundemos la Historia
la verdadera la humana
Noah no pudo entender por qué tanto odio en éste mundo pero en el mundo del amor tampoco lo sabrá porque el odio no existirá |
Hoy la Historia
debería ser una concatenación de hechos –pasado y presente con sentido y dirección-
que vaya señalando el camino hacia una vida cada vez mejor. Pero hoy es un encadenamiento forzado de hechos
absurdos, irracionales repudiados por la razón humana, y sólo justificado por
la élite social que con él se beneficia. Una antihistoria ¿cuántas absurdas paradojas se dan en éste mundo? ¿cuántas
por su dimensión lo definen? Decimos absurdo e irracional porque nunca deben
ocurrir entre humanos, y por su contenido antihumano. Y podemos constatarlo con
un suceso que ahora traemos para el análisis.
Y a éste mundo ¿habrá que recordarle -entre
tantas- aquella cruel paradoja de vidas que fueron truncadas por un joven? Un
hecho –como tantos otros- que debió tocarle su raíz el 14 de diciembre de 2012,
en la Escuela Elemental de la localidad de Sandy Hook de Newtown, Connecticut,
EEUU. Pensamos que a este mundo pudiera parecerle absurdo que toquemos este
hecho. O pueda que le resulte incomprensible, desagradable e incómodo, o como
mínimo, preguntarse ¿y a ésta fecha para qué remover tan enojoso asunto? ¿qué y
quién ganará con eso?
¿Paradoja? yo sólo quería seguir viviendo |
Quién recogerá éste llanto quién éste grito ¿aún queda la esperanza? ¿quién desata la paradoja? |
¿Y por qué paradoja? Porque según la común
definición de las Ciencias, la Evolución natural, el sentido común, etc., sólo se
nace para vivir, pero hoy el “modo de vida” de éste mundo trunca
violentamente este sagrado derecho. Y no solo el del hombre, sino también el de
todo ser vivo, sean de flora o fauna. Ningún reino escapa a su hacer depredador. Es la absoluta
negación al sentido y dirección de toda verdadera historia, o mejor dicho, el
imperio de una historia –contrahistoria- de violencia.
Y ocurrió ese día que un joven de 20 años, Adam
Lanza, con el arma de la propia madre –aficionada a éste “deporte” y profesora
de la Escuela-, se dirige a su antigua Escuela, y allí ultima una a uno 20 niños
– de 6 y 7 años- y 7 adultos, entre estos, la propia madre, Nancy Lanza, y a
dos maestras que intentaron frustrar su propósito. Y después de terminar su
faena sangrienta, él se suicida. Un total de 28 víctimas ¿la memoria de éste
mundo lo habrá registrado como “experiencia” para que nunca, jamás vuelva
ocurrir?
Adam lanza aquél niño que fue una esperanza |
Adam Lanza fue aquél niño y este mundo le rompió su esperanza |
Niños que cuando nacieron –también los
adultos- seguramente en su momento produjeron la mayor de las alegrías, y
también la mayor de las esperanzas, tanto para las familias como para un mundo
mejor. Obviamente, ellos jamás pudieron imaginar que el ilógico modo de vida de
este mundo le deparaba este ilógico destino, a pesar de la alegría que con
seguridad cada mañana despertaban para luego ir a su Escuela con el ideal de
formarse para un futuro mejor. Ni tampoco el propio joven asesino ni menos su
madre. He aquí la faceta más absurda, irracional y cruel –entre otras- de la
paradoja. ¿Cómo es posible que un azar de este nivel quiera normar la vida? ¿y cómo
definir ésta vida? Un modo de vida de este tipo no es más que un síndrome que se instala en los intersticios
de la sociedad.
Emille solo sabía amar jugar y vivir. Y nada sabía del síndrome |
¿Y por qué es un síndrome este modo de vida?
Porque su dinámica y modo de existir y ser sólo responde a una violencia
endémica, sistémica. Todos sus asuntos, intereses, contradicciones,
dificultades, frustraciones, “ideales”, objetivos y fines son encarados y
resueltos con el uso de la violencia, incluso hasta su tipo de “amor” que
practica no escapa a ésta especie de ley irracional, como tampoco la vida
familiar. Y él –el modo y su violencia- se instala entre las relaciones de los
hombres, y en las de éstos con el resto del mundo, como un medio de existencia,
de justificación y de “satisfacción” a través de éste tiempo de vigencia
milenaria. Y por ser tan antiguo ya es esencia, naturaleza consustancial de su
historia. En síntesis, es síndrome porque niega la vida. Y es por ello, y en
virtud de ello, que ocurren –y seguirán ocurriendo, a menos que construyamos
otro diferente- estos hechos sangrientos –asesinatos, suicidios, guerras,
masacres, depredación, etc.- como su particular forma de manifestarse y mostrar
su dominio en lo que hoy se llama “vida”.
Ofertorio de amor de los niños sobrevvientes a los niños que obligaron partir... pero les dijeron: les amamos |
Y una manera muy particular de la
manifestación de esta violencia en la llamada “vida”, es la que hoy se conoce
con el nombre de política –y sus
formas superiores y modernas: la negociación, la mentira, procesos electorales
y guerras-, así como la típica manera de hacer
la economía y el acto de legislar para la creación de sus leyes, en donde pretende encubrirla haciéndola "necesaria" y legal.
Cuando ocurrió el citado hecho fue tal el impacto que su repudio fue unánime y mundial, y no se escatimó ningún medio de protesta: desde el llanto, “lo lamento”, “sentido pésame”, el ramo de flores, la oración, banderas a media asta, el rosario en familia, vigilias, etc., hasta los grandes discursos y anuncios de “radicales medidas”. El propio presidente de los EEUU, digo conmovido: “Hemos sufrido demasiadas de estas tragedias en los últimos años…hemos pasado por esto muchas veces”. “La mayoría de los que murieron hoy eran niños, hermosos pequeños niños…Ellos tenían sus vidas enteras por delante” “Nuestros corazones están rotos hoy”. “Vamos a tener que unirnos y tomar medidas significativas para evitar más tragedias como ésta, independientemente de la política”. ¿Cómo, la ausencia de unión es la causa? ¿Ahora desconfía de la política? ¿y cómo hacerlo fuera de su política?
Cuando ocurrió el citado hecho fue tal el impacto que su repudio fue unánime y mundial, y no se escatimó ningún medio de protesta: desde el llanto, “lo lamento”, “sentido pésame”, el ramo de flores, la oración, banderas a media asta, el rosario en familia, vigilias, etc., hasta los grandes discursos y anuncios de “radicales medidas”. El propio presidente de los EEUU, digo conmovido: “Hemos sufrido demasiadas de estas tragedias en los últimos años…hemos pasado por esto muchas veces”. “La mayoría de los que murieron hoy eran niños, hermosos pequeños niños…Ellos tenían sus vidas enteras por delante” “Nuestros corazones están rotos hoy”. “Vamos a tener que unirnos y tomar medidas significativas para evitar más tragedias como ésta, independientemente de la política”. ¿Cómo, la ausencia de unión es la causa? ¿Ahora desconfía de la política? ¿y cómo hacerlo fuera de su política?
Y como esta foto es la actual historia: asesinados y victimario -Adam Lanza- y su madre -Nancy- en un solo nexo. Pero en la historia humana no existirá esta historia de hoy |
Y después de tantos actos de condolencias y
de “humanitaria solidaridad” –incluso, hasta de reivindicación económica-, luego
todo siguió con su curso “original”. Nada cambió. Y recientemente, el propio
Congreso negó el proyecto Ley “reducción
y control de armas” en manos de los “ciudadanos” que como gran y eficaz
medida presentó el presidente como parte de su oferta oficial. Y por otra parte
la Corte Suprema rechazó el derecho de los Estados a controlar la posesión de
las armas de fuego, porque la 2ª Enmienda de la Constitución les garantiza a
los ciudadanos el derecho a poseer y portar armas a efectos de defensa
personal, y ésta prevalece sobre cualquier ley estatal o local. Y es que en la
“lógica” de este modo de vida cabe como algo jurídico-normal el “reclamo” ¿cómo
es posible que se pretendiera afectar a tan digno “deporte” y al sacrosanto
“derecho de la autodefensa personal y ciudadana”?
Y su brío no pudo detener el odio...pero en un mundo de amor si podrá |
Mientras la impunidad como capas unas sobre
otras sigue sumándose e incrementándose en la actual sociedad moderna, como
parte del mecanismo de retroalimentación de esta violencia para la pervivencia
de su síndrome modo de vida. Y así se
crea una particular sensibilidad
–antisensibilidad social- con la que este hombre ciudadano responde dentro
de éste típico modo de vida. Y la siguiente foto que publicamos es claro testimonio-información
de cómo, a través del tiempo, se funda y se hace autosostenible este síndrome.
Y es una fotografía –como código icónico- que ilustra, en general, la “vida”
norteamericana, pero también a la rusa, china, europea, africana, asiática, australiana,
latinoamericana, específicamente testimoniada a través de sus centros urbanos y
civilizados. Lógicamente, podría ser con otros códigos y medios –para ser
diferentes en lo formal-, pero para alcanzar los mismos fines. Y ante este
cuadro llamamos –una vez más, y seguiremos haciéndolo- a una necesaria
reflexión que conduzca a una necesaria acción de transformación de éste
síndrome modo de vida para arribar a otro de verdadera fundación de vida, y por
ende, a un autosostenible vivir.
Y en esta Escuela-Institución es donde se funda esta "filosofía" de la violencia que invade a toda la sociedad |
Y en verdad traemos este hecho a éste día,
además de convocar a la necesaria reflexión sobre esta contrahistoria y denunciar la
impunidad mundial, también para expresar una legítima ira –aunque solo llegue a
un simple rasguño- ante esta memoria del olvido que implacable e impune condiciona
a la actual humanidad a una típica
conducta que ve y siente éstos hechos como un acontecer normal y natural bajo la forma-conducción de la actual historia positivista, que además de ser formadora-condicionadora
de conductas sociales, es un gran agente borrador de la memoria colectiva para fabricar un ser insensible.
Afortunadamente, existen –y seguirán existiendo- hombres que escapan a esta contrahistoria, y en donde reside la
esperanza de un mundo mejor.
Y la vida verdadera es poderosa sabe vencer las sobrevivencias ¿Pero en otro momento vencerá su esperanza? |
Solo queríamos vivir
¿por qué no podíamos?
Ahora viviremos
en éste sueño de amor
y sobre el oleaje de sus notas
lo haremos realidad