In memorium
al homo sapiens…
aunque ser náufrago su
esencia
hombre aun vive
Y este hombre
mirándose en
su horizonte
rompe a llorar…
y llora porque le
duele el alma…
y el alma duele
cuando la vida
ha sido rota
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| Y un hombre llora/Sin autor conocido |
Y el hombre…
tallado en edad de siglos
toda su existencia ahora
asomándose a sus ojos
mirándose a sí mismo
desde su océano mar
y sin poder evitarlo
irrumpe en llanto
Y el alma que fluye de su vida
convocando a otras tantas almas
en tantas tardes de su vasta edad
sobre las luces oros del ocaso sol
baja en lágrima
a las aguas de su mar
…haciéndose una sola oceánida!
Y ese llanto milenario…
el alma en la lágrima y
la lágrima en el alma
componen canciones tristes
que van cicatrizando las heridas
para que la alegría vuelva
anidar
Alma “corazón” llena de anhelos
irradiándose en esperanzas que
quieren ser realidades
para que
se devele la condición
humana
y lágrima
cristal en sus aguas
transida y en conmoción
goteándose en gamas arcoíris
queriendo recomponer la vida
Ahora alma y lágrima
en amor indagándose
mientras a su alrededor
como una corona celeste
giran auras de vivencias
que cada una va erupcionándo
como buscando dentro un
solo
rumbo hacia una sola vida
plena
de amor belleza verdad
libertad
humildad e inocencia
que va conduciendo al Ser
bajel navegando en su mar
hasta ser gestación de vida
y lágrima es
aguas de llantos
como lluvia que se desborda
por la playa de sus párpados
anhelo de la vida que
es la sal de
su amor
Lágrima en el alma!
alma en la lágrima!
bajando por las mejillas
¡qué llanto por la vida!
hacia su playa…solazándose
y mirando a su mar… Ser!
una sola vida que
en un
porvenir cercano habrá
de vivirse verdadera
Lágrima dentro del alma
y alma dentro de
la lágrima
¡llanto cincelando a este hombre que
viste cruel sociedad a su medida pero
habrá de cesar cuando cese el llanto!
Y alma en la lágrima
la lágrima en el alma
bajando del océano de sus
pupilas
ahora ambas en alegrías corriendo
por las mejillas del nuevo
hombre
desembarcando en la
comisura de
los labios de una boca
franca que
ahora sólo sabe reír a
carcajadas
¡Y al fin el hombre tejido en el
enjambre del porvenir que ya
nunca más cesará de ser porvenir
como el fruto que guarda semillas
para hacerse árbol a bosques!
Anidamos en las alas de la alegría...
y en esa pluma que se refugia en la tristeza
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| Ediciones jaced----- |
