lunes, diciembre 05, 2016

El país que dejó de ser



Y el hombre
sumido en la obsesión de posesión
solo llega a situaciones irreversibles
totalmente desnudo del amor
roído por el odio y el egoísmo
existencia en desiertos inescrutables
del que nunca más podrá retornar
entonces ¿para qué atesorar
Poder y riquezas?

 
Recuerdo de naturaleza/Isaac Cordal













Y antes el hombre integrado a la naturaleza
andando en comunión con los otros seres vivos
como río joven entre cada estación vivificándose
luego hombre artificial apenas riachuelo cada vez
con menos caudal arribando a la estación invierno
 ahora hombre como simple quebrada seca llegando a
la estación verano con una vida enteramente enteca
completamente ajeno a las brisas de primavera y otoño
simplemente sobrevivencia negándose a sí mismo y su
tiempo pasando indiferente y él mismo viéndolo pasar
hombre ya en cuero seco bajo un cénit sol de mediodía

Y estuvo como árbol en bosque de simientes vivas
ahora está en un tiempo rumbo sin sentido humano
hombre de rostro con ojos que ya no ven para sentir
hombre como país ya esqueleto bajo el mismo sol
antes haciendo vida ahora subsiste sin hacer propio
pero sus élites continúan en festín sobre su cuerpo


¡Venezuela! país de los tantos del mundo sin savia como
un hombre en harapos un pie desnudo y otro en alpargata
pero rico en cuasihombres de febriles prácticas de cultos
tierra mina abierta en explotación en manos saqueadoras
mientras habla con una “ideología” que no es pensamiento
extraviado en quisicosas insustanciales de siglos pasados
la ignorancia tejiendo sus huesos en esqueleto inorgánico
mientras sus élites en el Poder se disputan sus desechos


Pero su flora y su fauna aún habitándola regada por
sus antiguas aguas tropicales bajo un sol espléndido
que de levante a poniente va testimoniando su vida
silvestre con el riego vivo de sus luces crepusculares
y una luna navegando hacia sus lagos de plenilunios
con sus cíclicas mareas nutriendo la vida de sus tierras
y un cielo azul salpicado de arcoíris como señal de esa vida
¡la vida! ¡la vida! esperando por la resurrección del hombre



lunes, noviembre 14, 2016

Simplemente la vida


Y la vida en este tiempo ya no sabe por dónde andar
una minoría “vive” nadando en el bienestar material
otra gran mayoría “vive” escogiendo tipos de muertes
entre la bala, el miedo, los cultos, las guerras, las drogas
el asesinato, el terrorismo, la ignorancia, las epidemias
la miseria o bajo la simple política del permanente engaño
y ahora los niños nos vienen en cunas de cajas de cartón,
 o bolsas plásticas o basureros o en series de nonatos o
sobrevivientes para “vivir” en permanente desnutrición
sin embargo, nos dicen “vivimos” en un tiempo de “vida”
pero ¿cuál vida? en verdad ¿a esto se le puede llamar vida?

















Y oímos decir con frecuencia
la vida es compleja
que difícil es esta vida
la vida se hace imposible
que misteriosa se ha hecho la vida
o la vida es drama o comedia de teatro y
estas expresiones surgen en el quehacer cotidiano
conscientes o inconscientes o por turbios velos
simplemente para ocultar la violencia de este tiempo
pero precisamente estas frases son sus testimonios

Y la vida contrario a lo que se dice es simple
simplemente simple profundamente simple
en concordancia como discurre la naturaleza
y antes, pero muchísimo antes bajo una
sabiduría natural y experiencia de la vida
¡nacimientos! el llanto del niño simple alegría
simplemente nacimientos de niños y
a través del recibir y entregar amor
simplemente se convierten en hijos
simplemente hombres o mujeres
simplemente padres o
simplemente madres
impulsados por la fuerza del amor humilde
y se vivía la vida siempre pendiente de mejorarla
ocurriendo en una naturaleza preñada de paisajes
cantados por sus aguas sus cielos sus tierras
simplemente bajo la vida de la naturaleza

Y en un largo andar de hermandad
la poesía simplemente en música
la música simplemente en poesía
navegando por toda la piel de la vida y
por sus poros empapando su existencia
y la poesía en un hacer constante natural
simplemente se hace corazón de la música
la música simplemente corazón de la poesía
y el amor simplemente en amor en crescendo

Y es el tiempo cuando al niño le brotan alas
porque goza del fluir constante de su libertad
elipse de erupción permanente de su alegría
entonces, a ellos siempre a ellos
la poesía les canta en la música
la música les canta en la poesía
simplemente una canción de cuna


Y hay que ver cómo la alegría ascendente
primero se hace como nube expandiéndose
luego después de la lluvia como un arcoíris
en el cielo soleado arqueándose tanto que
cuando niño decíamos y en verdad lo creíamos
¡el arcoíris está bebiendo aguas en el mar o en el río
y cuando termine de beber caerá más alegre la lluvia!
que bullicio de niños mirando hacia ese cielo azul
entonces, todo era un hacer de fertilización
por todas partes realizándose la polinización
en medio de aquel ulular de músicas de alas
de mariposas de colibríes de abejas y del viento
el espectáculo de la fructificación de la vida
bajo la simple égida del amor brotando por doquier
simplemente en la madre en el padre en el niño
en la flor en toda palpitación de la naturaleza


Y el hombre y la mujer
solícitos en la procreación
siempre recreando aquel antaño hacer
originario de cuando aquella fogata
simplemente asomando el rostro del hombre
portando en amor al incubado humano
simplemente el humano empezando hacerse
la primera historia simple construyéndose
simplemente fueron los primeros tiempos

Pero a estos primeros tiempos de la vida
le sucede un terminante Ahora, un largo ahora
una existencia por los siglos de los siglos del amén
un ahora, todo presidido por la violencia que su
ciencia histórica afirma ser partera de la historia y
como partera todo queda bajo la égida de la muerte
simplemente un ahora en cajas y sin almas

Un ciclo que sustituye al ciclo de la vida primogénita
un tiempo trágico como grieta en la vida del hombre
cancelando aquella primera historia verdadera
¿y ahora cuál ha de ser el destino de la vida?
yacente bajo piedras agrietadas deshojación rotas
ruda ausencia de la presencia de las estaciones
que opaca la expresión de los sentimientos
en un ahora por los siglos de los siglos amén
y amén en amenes abruptos
interminables sucesión de rupturas
simplemente rupturas en series como
amén rompiendo la oración del hombre

Y hombre con su incubado humano aún más latente
ahora vorazmente entregado a la posesión material
una vida sin cantares la poesía ahuyentándosele
la música trocándose en permanentes ruidos metálicos
la inundación de anti-vida donde el hombre solo se muta
en constantes formas artificiales fábrica de cuasicosas
su amor mercantilizándose bajo un flujo calor artificial
simplemente sus simientes quebrando sus envolturas


Ahora, la mujer da a luz pero incapaz de hacerse madre
simplemente entregada a la esclavitud de la sociedad y
a la de ella misma dominada por menesteres femeninos
el hombre procreando pero incapaz de hacerse padre
ahora ocupado perfeccionando el hacer del lucro
simplemente entregado a la acumulación material
ahora el niño nace sin poder hacerse hijo verdadero
 pero ¿sus nacimientos? ¿vivirán verdaderamente?
simplemente nacen y se acunan en cajas de cartón
o en bolsas plásticas o en basureros o nonatos en series o
sobrevivientes que “vivirán” en permanente desnutrición
bajo formas “seres vivos” pero “seres” muertos en vida

Pero en este cielo que el cosmos abre azul
el arcoíris siempre sigue bebiendo sus aguas
y tejido en el espectro lumínico de sus colores
señal milenaria que la vida siempre brota para existir
simple bajo el bullicio alegre de los pájaros de la lluvia
mientras el amor acampa espera atisbando por rendijas
y aún en ese hombre entregado a la ambición material
el incubado humano también acampa viendo por grietas
en vida latente semejante a la oruga en su crisálida que luego
volará hecha mariposa y como ella también germinará a la luz
para transformarse en el Ser humano que al fin vivirá la vida
mientras el arcoíris siempre seguirá bebiendo en sus fuentes
simplemente como este Ser bebiendo en la fuente del amor




martes, noviembre 01, 2016

Silencios entre silencios


La voz ópera primera del hombre
susurro de alas de amanecer o de aguas de manantial
o luces del alba abriéndose en luces de las auroras o
brisas alegres entre las hojas o de yemas asomándose
o de cáscaras de huevos de pájaros abriéndose
para dejar libre al primer pillar de sus pichones o
semejante a ese sutil cantico que traen las estaciones
o a ese intangible silencio musical que queda en el aire
flotando después de escampar el fuerte aguacero
o el del mismo viento como partero de la fructificación o
voz de verdadera mixtura de todas estas voces naturales
pero luego el hombre las sustituye por fonemas disímiles que
nacen de aquella confusión de lenguas de la Torre de Babel
que van a verterse en la fuente de la obsesión de posesión
forjando su lengua que le irá tallando una historia extraña
entre rupturas de silencios como sus primeros lamentos
y desde ese entonces el hombre no conoce al hombre



Hay silencios entre silencios
como el del niño en el vientre
cuando sueña su sueño entre
los arcoíris de sus aguas amnióticas
que le tejen la vida que habrá de vivir
y el mío el mismo sueño cuando niño
pero que todavía no ha podido llegar a ser
y tantos niños y sueños todavía inconclusos porque
este tiempo no es para sueños ni menos para niños
en verdad ¿para qué crecemos y llegamos a hombre?
¿para dejar ser ese niño que sueña su sueño de vida?
en verdad, ¿cuándo seremos toda la vida este niño
que sueña su sueño para construir su propia vida?
silencio! silencio!  Oh! silencio que ellos imponen
pero tallo mi silencio de niño que me resguarda
en el vértice de la última elipse del caracol

Y la naturaleza también tiene sus silencios
musicales silvestres que van confluyendo
el canto de las aguas del cielo del rio del mar
 o de los vientos de las montañas elevándose
o de las raíces de los árboles sembrándose
los del vuelo de los pájaros y de las mariposas
o de esas hojas que lentas van cayendo en otoño o el
roce del viento con el cuerpo de Isadora Duncan danzando
también del movimiento giratorio de los cuerpos celestes
en el Universo como sus flujos que bajan en las noches
abrazándonos como recordándonos  que somos sus hijos
maravillosas confluencias en una existencia equilibrada
la armonía como el silencio más hermoso del universo
pero en este mundo ¿por qué nos hacemos sordos?

La danza de Isadora Duncan

Porque sólo oímos el quiebre de las rupturas
que interiorizamos enmudeciendo el alma y se
eslabonan en una cadena que nos arrebata la vida
dentro de una estructura que nos impone dueños
silenciándonos a pura fuerza de sus silencios
altos muros en complejos trazados mixtos
tapando cualquier intersticios a la libertad
que la estallan en mudos pedazos
y el pájaro me mira desde su jaula
y también yo le miro desde la mía

Pero este mundo mira indiferente
y solo crece y crece testificándose
en sus ya 8 mil millones de habitantes
una jaula férrea que entre sus invisibles
barrotes podemos mirarnos pero sin mirarnos
porque nos vemos con rostros de ojos ciegos
como el pájaro enjaulado que canta sin cantar
porque solo canta canciones en trinos mudos
vivimos el tiempo del llanto como dice el poeta
León Felipe que su poesía testifica en la historia
pero la lágrima en su concavidad guarda la vida

Pero ¿por qué, para qué este incesante crecer?
¿cuál es el tipo de vida que ha llegado obtener?
una jaula como hogar permanente del hombre
que en su tiempo solo achica la vida verdadera
su luz refractándola en franjas de penumbras
marchitando el nacer del otoño y del invierno
y el verano y la primavera ensombreciéndolos
la tristeza es el gris manto que nos amamanta

Pero miro hacia arriba y allí sigue el cielo azul
y el viento siento que corre allá en las colinas
y no tan lejos oigo el susurrar del río
el oleaje del mar que me canta su poema
imagino sus peces moviendo sus aletas
en su casa de aguas que parece elástica
y su vida inmemorial también elástica
navegantes en un grandioso silencio
y de pronto soy pez nadando entre ellos


Y yo el hombre con el derecho de amar
agrandando mi espacio pero con la luz
y entre rendijas hago sol a mi luz
detrás de este hombre buscando al hombre
sin linternas pero con las pupilas encendidas
entonces, ¿en cuál tiempo habremos de ser
lo que tanto soñamos en nuestros sueños?

Y hago un mundo mi mundo
entre paréntesis de silencios con
una religión a mi imagen y semejanza
que proclama el amor entre los hombres
como el auténtico amor que proclama
¡soy el mundo! ¡somos el mundo!
pero ¿quién mide la dimensión de su vivir?
sin jaula nosotros mismo con luz esparcida
para formar una vida de unión indisoluble
el pájaro liberado desde su vuelo me mira
y yo completamente libre también le miro
sí ya sé que es desde el sueño
el mismo sueño cuando niño

Entonces ¿cuándo vamos a despertar?
y en este tiempo ¿soñamos para rebelarnos?
¿cuándo se harán realidad nuestros sueños?
cuando en el lugar cósmico que nos entregó el
universo construyamos nuestro puesto cósmico
igual como lo han hecho y lo siguen haciendo
los seres vivos diversos de la flora y de la fauna
como sus pájaros, hierbas, arboles, flor, elefantes
viviendo fructificándose en comunidades mutuas
y ¿por qué no hemos concientizado nuestro origen?
¿por qué silencios sobre nuestra celeste maternidad?


Y por la fuerza de la necesidad de vivir que deriva
de aquél estallido cósmico que origina el Universo
se ha de romper la impuesta cáscara de silencios creada
en este tiempo por tantas rupturas en el ciclo de la vida y
bajo esta fuerza concientizaremos nuestro origen cósmico
para llegar a ser primero hombrehumano, y luego, humano
y al fin, volver a reinar la gran cadena primogénita de la vida
donde cada quién es cada quién Ser conviviendo en amor
como el pájaro que es ser pájaro
como la flor es ser flor que se hace ser fruto
como el árbol es ser árbol que se hace ser bosque
y el niño es ser niño que habrá de ser humanidad

Fotos de los cielos
de Mery Sananes

jueves, octubre 13, 2016

Doble conjugación de palabras conjugadas


“Algarabía de polen
en tierra desértica
persistencia de la vida
sobre tribulación
de la muerte”
(Mery Sananes, Algarabía del polen)




Y llega la noticia: acaba de ser editado el poemario Palabras conjugadas, de Mery Sananes. Y su lectura desata reflexiones sobre la existencia: unas para develar de la actual realidad que padecemos, lo que usualmente se llama “vida”. Y otras, para la expresión-talla de la vida que anhelamos, que creemos que todavía está en un tiempo por venir, y del que ya se observan relampagueos de su llegada por entre las rendijas que le abrimos a este tiempo. Y en éste sentido Palabras conjugadas, me trae el rondar de una antigua pregunta, que formulé a los mundos forjados antes del mío, y a los que les siguen –que en esencias son los mismos- “¿en verdad creen que la tragedia-comedia es la esencia definitoria del hombre?”. Y creo, que Palabras conjugadas, –y sólo haré notas generales-, apunta a las respuestas de esta pregunta en una doble vertiente irreconciliablemente antagónica, como dos grandes ríos torrentes: uno oscuro, preñado de sombras para ocultar los trozos de la vida que va arrastrando, con los que testifica en su desembocadura la muerte que viene desatando: es el tiempo-muerte. Otro luminoso, que va gestando y germinando la vida por dónde va pasando y regándose, y en su delta de luces, testifica el inviolable y sagrado derecho a la vida: el vivir, desde el niño al hombre a la humanidad verdadera: el tiempo-vida. Ambas vertientes, ambos tiempos, ambos mundos, aunque irreconciliables, se entroncan en el poemario –lucha de los contrarios-, precisamente para hacer conjugaciones, Palabras conjugadas.  

Esta primera vertiente o tiempomuerte, testimonia su existencia con  la conjugación de los verbos asesinar, depredar, mentir, engañar, guerrear, raer, exterminar, masacrar, etc., y similares, que prueban la existencia de su “vida” violenta: la antivida, que conjuga estos verbos en la práctica y en la teoría de su existencia para convencer, asegurar su validez, su “eternidad”, y así, continuar existiendo. Y la muerte es su símbolo, el santuario de su “vida”, desde donde, permanentemente, agrede, depreda a la verdadera vida para poder existir, hasta el extremo de crucificar al hombre, hacerlo cristo-hombre, hombre-cristo: santificación de la muerte. Y la segunda o el segundo, como antítesis o contrapartida, la corriente –o tiempo- torrente hacedora de vida, el anhelo profundo de una verdadera y única historia humana –que ya en este mismo espaciotiempo se viene gestando-, la que ha de testificar, registrar y narrar el vivir verdadero, precisamente porque el hombre es su autor, creador, y protagonista de su propia vida, como constructor del mundo humano.

Y este mundo –el derecho y ejercicio libre de la vida-, aseguramos que habrá de advenir –temática central de Palabras conjugadas-, para existir siempre conjugando los verbos amar, cantar, celebrar –y hago énfasis en el sentido infinitivo- , vivir, querer, anhelar, incluso, el morir, pero como antesala necesaria del vivir verdadero. O sea, un morir, solo cuando la vida ha cumplido su ciclo natural de existencia, como lo hace la hierba: “perece” cuando gesta su simiente, y ésta, en ciclo infinito en lo finito, germina para que la hierba siga existiendo. Y aclaramos que Palabras conjugadas, no apunta hacia esta vertiente opuesta sólo como una simple antítesis o contrapartida, como si fuera otro accidente histórico más en los tiempos de la existencia, sino como el anuncio del tiempo único de la refundación de lo humano, del human reino, y por tanto, el tiempo-dominio absoluto del amar, del vivir, del querer, del embellecer, del liberar, del anhelar, del morir para vivir…, verbos, acciones inherentes hasta impregnar las médulas de sus gerundios y participios, consustanciales a la vida humana, y a su ser, el humano.

Un real tiempovida, hecho con la sustancia de estos verbos, donde el hombre, el mismo decide descender de la “cruz”, para dejar de ser el cristo-hombre, el hombre-cristo, y al fin, hacerse hombre hermano del hombre, reivindicando a plenitud el hermoso derecho a la vida con el ejercicio del amor y la conjugación de estos verbos -infinitivos puros- en su acción teórica-practica que construye la vida. Y considero –repito-, que es la finalidad principal de Palabras conjugadas, planteándose, abriéndose paso a través de la primera vertiente.

Tampoco, palabras conjugadas, es la simple denuncia, el socorrido abrir un expediente a la existencia de la “vida” de este tiempo –y le salgo al paso, antes de que puedan surgir como interpretaciones de Palabras conjugadas-. Nunca lo es, aunque aparentemente tenga un poco de eso. Palabras conjugadas es la exposición - obviamente, en lenguaje poético- del hacer violento de este tiempomuerte –en su visibilidad abierta, pero mucho más en su "invisibilidad"-, y de la vida que le corresponde. Reafirma la noción de la existencia actual de la antihistoria “humana”, como definitoria de este mal llamado tiempo de “vida”: el “hacer” histórico de los cuasihombres, fabricantes de sus cuasicosas –conceptos de la cosmovisión del maestro y filósofo Juan García Bacca-, como el hombre actual, que ha transitado las épocas antigua, moderna, y transita la contemporánea –términos que uso con reservas por sus imprecisiones temporales-, hasta este presente, como puro pasado violento, y por tanto imposibilitado de llegar al futuro.

Y como obligada consecuencia, opuesta a esta antihistoria, Palabras conjugadas, sin decirlo expresamente o directamente –la poesía no necesita del lenguaje directo-, nos entrega el planteamiento de la necesidad, en términos de poesía científica –binomio de sonido  paradójico y un tanto no grato-, del advenimiento del tiempo totalmente humano, y su vida humana, con sus inherentes atributos del amor, la belleza, la verdad, la justicia, la libertad, la plena sensibilidad, la inteligencia para la creación, y de otros de igual sentidos. Diríamos el reino de lo humano, que desde las entrañas de esta misma antihistoria, y pese a ella, se viene gestando, o más bien, retoma su antiguo hacer primogénito. Y por ello, creo que Palabras conjugadas, está lejos de eso de denuncia, de expediente, o de algo parecido. Acaso, ¿exponer realidades violentas –en especial, las ocultas o latentes-, en sí misma, se hacen para formular tales recursos-palabras? Más bien creo que son palabras -inconscientes o conscientes- que contribuyen a justificar el sentido fatal de la realidad -la fatalidad-, para que la veamos, la sintamos como de obligada, natural, o necesaria realización trágica ¿hasta cuándo denuncias, expedientes, etc., etc. para que las cosas sigan igual? La poesía no nació para eso.


Porque ¿cómo denuncias, hacer expedientes, etc., a algo, que está allí, a nuestro lado, tocable, medible, aplastante? En todo caso, ese algo, él mismo, es autodenuncia, autoexpediente, etc. Creo que estas “acciones”, solo prueban lo inútil de algunas palabras, y ayudan a crear ese sentido de fatalidad, como rasgo de la actual vida de este tiempo. Y toda fatalidad contribuye a sostener-justificar lo que dice denunciar, precisamente  por hacerlo común, corriente en la vida. Una trampa más de la palabra de este tiempo para resguardar su “existencia”. Entonces, ¿para qué denunciar o levantar expedientes, etc., a algo que por sí mismo lo es? Hago énfasis en este aspecto –y repito, para atajarles el paso, antes de que surjan- , porque firmemente creo que no es el caso de Palabras conjugadas, más bien, uno de sus propósitos es  develar, combatir el “reino” de las palabras inútiles, y en general, el reino de las mentiras, de las trampas.

Entonces, creo, que estamos más en la propuesta en los términos de Pío Tamayo, en el sentido de develar la realidad concreta, ese inmenso y terrible peso aplastante de la condición humana, para concientizarla sin ambigüedades, y con esta clarificación, poder librar el combate contra esa realidad a favor de la vida. Y, en última instancia, de esto se trata, del combate por la vida, como también desde otro ángulo, lo plantea el poeta León Felipe, cuando atestigua históricamente con su poesía, que vivimos el tiempo del llanto, pero también, derivando de este llanto, su noción como arma, instrumento de liberación para hacer advenir ese reino humano. Lo que es la bala para el tiempo antivida, la lágrima lo es para el tiempo de la vida. Entonces, afirmo –repito a riesgo de errar-, Palabras conjugadas, está más en la noción de combate, de trincheras de un Pío Tamayo, o León Felipe o de un Juan García Bacca o de un Beethoven.

Y al referirme tangencialmente al pensar de  Pío, León Felipe, García Bacca, o de Beethoven –con el que Palabras conjugadas es congruente- , y a eso de denuncias, expedientes, etc., también es para dejar sentado su lucha contra la palabra hecha inútil, lucha para obligar a la palabra hacerse otra vez útil, a que retome sus orígenes o significados o propósitos originarios, sus sentidos humanos, para desmontar su alienación, sus “misticismos”, ambigüedades, con las que este tiempomuerte  y su cuasihombre, la han revestido, precisamente para velar su violenta realidad, encubrir sus reales naturalezas violentas, y así, convertirla, abierta o encubierta, en otro real soporte –como hoy lo es- del actual modo de vida, y de su sociedad. Y específicamente, con García Bacca -apuntando  hacia la extinción de la alienación-, cuando este hombre cuasihombre deje de hacer cuasicosas para "vivir", y desnudo de tal alienación, realice el gran hecho histórico de construir su puesto cósmico sobre el lugar cósmico, que el Universo le entregó, cuando aquella gran explosión –la conocida como Big Bang- estelar originaria.

Y de paso, con esta acotación general, dejo señalado el origen cósmico del hombre –y en general de toda la vida-, y de sus capacidades cósmicas, que algún día tendrá necesariamente que concientizarlas, asumirlas como una esencia vital, precisamente para poder construir la vida humana real y verdadera –su propio universo-, o sea, ese puesto cósmico sobre el lugar cósmico otorgado. Y agrego esto porque, creo, tengo la firme convicción, de que Palabras conjugadas, en esencia es una propuesta –el poema- cósmica, como también lo es la poética de Whitman, León Felipe, Beethoven, García Bacca, y tantos otros, para empujar con fuerza hacia adelante a la vida para que este hombre obtenga su liberación, deje de ser el cristo, encaminarlo a Ser humano. Y esto es posible hacerlo solo un hombre, un humano  portando esta consciencia cósmica.

Y tengo la convicción que Palabras conjugadas tiene este objetivo. Acaso, ¿la hoja es hoja simplemente por serlo? ¿y no nos dice más nada que hoja? ¿el niño es niño solo niño, y ya…y todo se agota en él? ¿y en verdad, en última instancia, para qué nace el niño? Y acoto una nota: la simple nubosidad de polvo cósmico crea estrellas, y a partir de ellas, en el tiempo-espacio, se genera todo un universo, inagotable. ¿Y nosotros? La Ciencia de la Cosmología física, afirma: somos hechos de simples polvos cósmicos…pero somos lo que hoy somos, y hacemos lo que hoy hacemos: una evidente, terrible y gigantesca contradicción existencial. Y ¿para qué esta nota casi de “ficción”? Solo para un intento de invitar a la reflexión, aunque estemos en un tiempomuerte ajeno a este acto… Y Palabras conjugadas -conjugación tras conjugación- si invita a que conjuguemos en medio de la actual vorágine de violencia, pero también, en el hermoso “torbellino” asombro de la permanente gestación de lo humano…




Y, finalmente, vuelvo a caer en la pregunta que formulé al comienzo…, mundos ¿creen que la tragedia-comedia es la esencia definitoria del hombre? Respuesta que nos entrega Palabras conjugadas, y que seguro, también la tienen los que aman la vida, porque en última instancia, de eso se trata: del amor, amar, cantar, vivir, danzar, hallar lo bello…Y por eso –así lo creo- la verdadera, y  fundamental conjugación que nos entrega Palabras conjugadas es, yo amo, tú amas, él ama, ellos aman…yo vivo, tú vives, él vive, ellos viven…yo canto, tú cantas, él canta, ellos cantan…yo danzo, tu danzas, el danza, ellos danzan… y otras derivadas, más audaces, más inventivas, aseguran: yo me canto, yo me celebro… un tiempovida, irreconciliablemente en contra, al yo asesino, tú asesinas, él asesina, ellos asesinan…yo masacro, tu masacras, él masacra, ellos masacran…yo miento, tu mientes, él miente, ellos mienten… yo robo, tú robas, él roba, ellos roban… tiempomuerte. La lucha de los contrarios –tiempovida Vs. tiempomuerte-, para que en este combate por la vida, brote y triunfe la necesidad del derecho a vivir la vida en alegría, ganar la vida, libre, verdadera, bella. 

Entonces, ¿cómo puede ser ésta su esencia? Y creo que Palabras conjugadas lo afirma, cuando expresa… “y que es tiempo de organizar los amaneceres para abrir las pupilas antes de que el alba se haya ido” o “hoy nos toca escribir el futuro, desandar la muerte y reinventar la historia que nos fue consignada en el átomo cósmico de nuestro nacimiento para ver si algún día en esta tierra de milagros y encantamientos el hombre comienza a ser y a vivir”. Y justamente, es ésto, de lo que se trata.

Y aunque creemos que no hay duda sobre el propósito, sentido y dirección del anterior verso –y pensamos que es el contenido medular de todo el poemario-, planteamos, pedimos, tomar esta gramática estelar de Palabras conjugadas como arma de combate para indagar, como si se fuera ingeniero o cirujano, en su espacio-tiempo, y en el movimiento de la vida que en él se escenifica, y en fin, ampliar la reflexión... ¿para hallar qué? y ¿hacia dónde podrían llevarnos? Mejor, entregamos al mundo –en su doble vertiente- la palabra para que dirima…, pero, la palabra útil, la que nació con el homo sapiens.